La cocina, ese espacio vital de la casa donde la funcionalidad y la estética deben ir de la mano, requiere una atención especial en su iluminación. En una cocina alargada, cada metro cuadrado cuenta y la elección correcta en la cantidad de puntos de luz y su potencia puede hacer la diferencia entre una cocina ordinaria y una extraordinaria.
Luz natural: La mejoraliada
Antes de añadir iluminación artificial, maximiza la luz natural. Las ventanas limpias y las cortinas adecuadas pueden iluminar mucho más de lo que uno espera.
Puntos de luz: La regla general
Para determinar la cantidad de puntos de luz necesarios, una buena regla práctica es asignar aproximadamente un punto de luz por cada 2 a 4 metros cuadrados. Así, en una cocina de 10 metros cuadrados, consideraríamos entre 3 y 5 puntos de luz.
Vatios por metro cuadrado: La fórmula de la potencia
En términos de vatios, la recomendación estándar para áreas de trabajo es de aproximadamente 150 a 200 lúmenes por metro cuadrado. Con la mayoría de las bombillas LED modernas, esto se traduce en aproximadamente 20 vatios por metro cuadrado. Por lo tanto, en una cocina de 10 metros cuadrados, necesitaríamos una potencia total de iluminación de alrededor de 200 vatios.
Iluminación de tareas: Potencia y posición
En áreas donde se realizan tareas específicas, como encimeras o islas de cocina, es ideal tener una iluminación más potente. Se recomienda una luz directa de al menos 300 lúmenes por metro lineal sobre estas superficies. Esto puede lograrse con tiras de LED o lámparas colgantes situadas estratégicamente.
Iluminación de los muebles: Añadiendo funcionalidad
No olvides la iluminación dentro de los muebles. Las tiras de LED de baja potencia, alrededor de 4 a 5 vatios por metro lineal, son suficientes para iluminar el interior de armarios y cajones, lo que te ayuda a encontrar lo que necesitas sin encender todas las luces de la cocina.
La potencia de la regulación
La capacidad de regular la intensidad de la luz es fundamental. Instala reguladores de intensidad para ajustar la luz de acuerdo con la tarea que estés realizando y la hora del día, lo que no solo ahorra energía, sino que también extiende la vida útil de tus bombillas.
Con estos consejos vas a tener la mejor iluminación posible en tu cocina alargada
Una cocina alargada bien iluminada es un equilibrio entre puntos de luz estratégicamente colocados y la potencia adecuada de cada fuente de luz. Recuerda que estos cálculos son aproximados y pueden variar según las especificaciones del fabricante y las preferencias personales. Para una planificación detallada y personalizada, se recomienda consultar con un diseñador de interiores o un especialista en iluminación.